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lunes, 18 de noviembre de 2024

“The Big Bend”: el edificio que busca romper las reglas arquitectónicas de Nueva York

 

Nueva York podría pronto convertirse en el hogar de un rascacielos tan innovador como polémico.

El estudio de arquitectura Oiio ha presentado el diseño de The Big Bend, un edificio en forma de U invertida que alcanzaría los 1.200 metros de longitud, superando en 300 metros al icónico Burj Khalifa de Dubái. Este diseño busca sortear las estrictas leyes de planificación urbanística de la ciudad al extenderse horizontalmente en lugar de elevarse de manera tradicional.

El concepto aprovecha un vacío legal que permite a los desarrolladores eludir las limitaciones de altura mediante una estructura curva. Según el arquitecto Ioannis Oikonomou, diseñador principal, el proyecto tiene como objetivo “doblar la estructura en lugar de las reglas de zonificación”, permitiendo así la creación de “uno de los edificios más prestigiosos de Manhattan”.

El diseño de The Big Bend no solo desafía los límites arquitectónicos, sino también los tecnológicos. Sus ascensores estarían diseñados para moverse tanto en trayectorias curvas como horizontales, una innovación que permitiría recorrer el edificio en su totalidad sin interrupciones.

Controversia en el horizonte

A pesar de su ambición, el proyecto ha generado críticas tanto entre expertos como entre residentes.

Reconocidos arquitectos como Steven Holl y Liz Diller han señalado el creciente impacto de los rascacielos en la desigualdad social y el medio ambiente de la ciudad. Holl describió estas estructuras como “símbolos de desigualdad”, mientras que Diller denunció que representan el “consumo por dólar” que define a Nueva York.

Por su parte, los residentes temen que la gigantesca estructura afecte negativamente a Central Park, un pulmón verde que ya enfrenta presiones urbanísticas.

Si el proyecto logra la aprobación, no solo redefinirá el skyline de Manhattan, sino que también abrirá un debate sobre el futuro de la arquitectura en entornos urbanos densamente regulados. ¿Es The Big Bend el símbolo de una ciudad innovadora o una muestra más de desigualdad y ostentación? El tiempo lo dirá.