MIAMI, (AFP).- El famoso sacerdote católico de Miami Alberto Cutié, que desató un escándalo cuando apareció en la revista de farándula TV-Notas besando y acariciando a una mujer en una playa, anunció que no abandonará a su novia sino que se cambia a la Iglesia Episcopal, que no lo obliga al celibato.
El religioso, que admitió estar "enamorado" y se negó a pedir perdón "por amar a una mujer", había pedido tiempo a sus superiores para "reflexionar" sobre su futuro.
El "padre Alberto", como se lo conoce popularmente en Miami, decidió finalmente continuar la relación con la mujer, abandonar la Iglesia Católica y "convertirse en miembro de la Iglesia Episcopal donde continuará su sacerdocio", informó esta entidad.
Acompañado por su novia, y mostrándose por primera vez en público con ella, Cutié participó ayer en una ceremonia en la Catedral de la Trinidad, en el centro de Miami, donde se produjo su ingreso formal a la Iglesia Episcopal.
Alberto Cutié, de 40 años, uno de los sacerdotes hispanos más famosos de Estados Unidos, con programas en la televisión y gran presencia en los medios, quedó en el centro de un escándalo a principios de mayo por la aparición de fotos suyas en una revista de farándula en las que se lo ve poniendo sus manos bajo el bikini de una mujer y besándola en la boca en una playa de Miami Beach.
"Agradezco a Dios por tantas personas que me dieron su cariño y apoyo", dijo Cutié ayer al anunciar su decisión. "Con ayuda de Dios espero continuar mi servicio y ministerio sacerdotal en mi nueva casa espiritual", agregó.
Se espera que el padre Alberto anuncie próximamente que se casará con su novia, Ruhama Canellis, de 35 años, origen guatemalteco, divorciada y madre de un adolescente.